La película se sitúa en 1916, en la
Rusia Imperial, en un baile celebrado en el Palacio de Invierno por el Zar
Nicolás II, de la dinastía de los Romanov, en el que se conmemoraba el
trigésimo centenario de gobierno de la familia. Pero entonces, la hermosa
fiesta es interrumpida por el malvado Rasputín, un monje entregado a la magia
negra cuya aparición causa un auténtico revuelo entre los invitados.
En la Revolución Rusa Rasputín
representa al hombre ‘Grígori Yefímovich Rasputín’, que ejerció gran influencia
sobre la familia imperial lo que provocó un escándalo en la Rusia
prerrevolucionaria, se le considera uno de los responsables del descontento que
terminó por provocar el estallido de la Revolución Rusa un año después y la
consiguiente caída de la monarquía. Fue acusado de espía, ya que circularon
rumores de que conspiraba en favor de Alemania, debido a esto, en la película,
el zar Nicolás II le acusa de traidor cuando se presenta en el Palacio de
Invierno y éste toma represarías.
A partir de aquí, Rasputín lanza un conjuro
donde se desencadena una rebelión de soldados y marinos instigados por los
bolcheviques, el gobierno cayó y Kerenski pasó a ser jefe del gobierno. Y el
día 25 de octubre de 1917 un pequeño grupo de bolcheviques ocuparon correos,
las estaciones, puentes y demás lugares estratégicos de la ciudad para asegurar
el éxito del levantamiento. La ciudad se llenó de barricadas y con el alba
dominarán también la fortaleza de Pedro y Pablo. Solamente el Palacio de
Invierno resistía, defendido por unos 400 cadetes, algunos cosacos, un pelotón
de inválidos de guerra, ciclistas y un batallón de mujeres. Finalmente el día
25 el acorazado Aurora disparaba una salva de artillería contra el Palacio de
Invierno, dando la señal de inicio del asalto. El ataque, bajo la dirección de
los bolcheviques Podvoiski y Antonov-Ovseenko, en realidad no constituyó un
verdadero asalto sino que tras la noticia de que Kerensky había huído de la
ciudad sus defensores abdicaron de su tarea. Así, cuando el edificio quedó
vacío, los atacantes entraron por ventanas y puertas abiertas del palacio. No hubo resistencia porque los ministros que
quedaban dentro del palacio dieron la orden de no disparar.
Todo esto, en la película constituye
cuando la ciudad entra en pánico, en el momento que Rasputín ‘lanza’ los
fantasmas al Palacio de Invierno para que fuera asaltado. Así como cuando
Anastasia y su abuela deben huir de la ciudad porque corren peligro.
Marta Albors 4ºB
No hay comentarios:
Publicar un comentario